El comercio local va recuperando su actividad después de dos meses de cierre, un periodo difícil especialmente para los establecimientos que llevaban poco tiempo abiertos y que han tenido que acercarse al medio virtual para mantener el contacto con los clientes.
Las tiendas se van adaptando a las normas de la desescalada para ofrecer confianza a los consumidores. Primero abrieron con cita previa y ahora con el aforo limitado y el uso de mascarillas y desinfectante. Los comerciantes reconocen que los clientes están concienciados.
A pesar de las dificultades, en El Armario afrontan la situación con optimismo y con ganas de prosperar con trabajo y constancia.